lunes, 20 de marzo de 2006

Protección solar en el invierno

Según la Academia Americana de Dermatología, en invierno quien pasa más de 20 minutos al aire libre no puede prescindir de un buen protector solar. No todos los argentinos están consientes de los peligros que el sol ofrece para la salud de la piel.
Está probado que el envejecimiento precoz y las lesiones en la piel pueden evolucionar y derivar en cancer de piel: son aquellas que resultan de la cantidad total de rayos solares que alcanzan la piel durante la vida (efecto acumulativo)
Es por eso que es tan importante la protección diaria. Independientemente de la estación del año, el sol en exceso es siempre nocivo para la piel que no está protegida. Las zonas de rostro y cuello necesitan de hidratación y protección solar. Además, la luz blanca que es usada en las oficinas emite una pequeña dosis de rayos UVA. Los niños reciben 3 veces más radiación UV que los adultos.
En los primeros años de vida recibimos el 80% de toda la radiación solar que acumularemos durante toda la vida. Es por eso que a partir de los 6 meses de edad todo niño puede ser expuesto al sol siempre que su pediatra lo permite y con el protector solar adecuado. Protegidos, los niños podrán aprovechar del sol todo lo que es bueno: la calcificación de los huesos y la mejora del ánimo.

REVISTA BIENESTARBIEN
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